Cambio de cerraduras

Precios de un cerrajero para el cambio de cerraduras

Qué tipos de cambios de cerradura se pueden realizar

La clasificación de una cerradura viene determinada según su forma o el mecanismo de cierre. Existen muchos tipos de cerraduras ajustadas a necesidades concretas. Podemos distinguir las cerraduras por las siguientes clasificaciones.

Según el tipo de cerradura

Entre los modelos de cerradura existentes, podemos enumerar los siguientes según su tipología:

Cerradura cilíndrica

El modelo más común de cerradura en los hogares es aquel que cuenta con un cilindro y un bombín de forma redonda o en pera. Este tipo de cerradura requiere introducir la llave en el bombín para abrir o cerrar la puerta. Hay una amplia variedad de cerraduras disponibles en el mercado, con diferentes niveles de calidad y prestaciones.

Cerradura embutida o empotrada

Este tipo de cerraduras son comunes en las puertas interiores entre sus modelos más simples, ya que cuentan con una manilla que al girar echa o retrae el pestillo y se adaptan a puertas de todo tipo de materiales. Mucho más robustas y seguras son las cerraduras empotradas de puertas exteriores, que pueden ser de alta seguridad.

Cerradura multipunto

La cerradura multipunto es una alternativa principal a los cerrojos y a menudo se combina con ellos. Este mecanismo cuenta con varios puntos de anclaje que se fijan al marco, dificultando el uso de palancas al intentar forzar la puerta. Se puede instalar en diversos tipos de puertas, pero es especialmente común en puertas blindadas y acorazadas.

Cerradura eléctrica

Estas cerraduras se utilizan principalmente en exteriores y son frecuentes en puertas metálicas que delimitan comunidades de vecinos o dan acceso al garaje. Su peculiaridad radica en la combinación de un sistema de cerradura cilíndrica con un componente eléctrico que permite la apertura mediante un mando a distancia con una frecuencia específica. También existen modelos con códigos numéricos.

Cerradura de sobreponer

Este tipo de cerraduras es muy común en las puertas de entrada de las viviendas. Se instalan en la superficie de la puerta y se destacan por su sencilla instalación, adaptándose incluso a puertas de grosor reducido. Por lo general, no son reversibles, por lo que es importante prestar atención al lado hacia el que se abren y cierran antes de hacerse con una.

Según el tipo de puerta

Si atendemos a la puerta donde se encuentra la cerradura, encontraremos los siguientes tipos:

Cerradura en puerta blindada

La puerta blindada cuenta con una estructura fabricada en madera, tanto en el marco como en la hoja de la puerta. Suelen disponer de refuerzos de hierro para ofrecer una mayor seguridad y resistencia ante ataques externos. Las cerraduras en este tipo de puertas están ubicadas en una zona de madera, con la gran ventaja que resultan más económicas que las acorazadas y resultan muy difíciles de forzar. Aunque no ofrecen el mismo nivel de seguridad que una puerta acorazada, la relación calidad - precio resulta muy atractiva.

Cerradura en puerta acorazada

Este tipo de puerta se compone de una estructura fabricada en acero, tanto en la hoja como el marco, además de una cerradura preparada para una puerta acorazada junto con cerrojos, bisagras y bulones que van integrados en la estructura de la misma. Una puerta acorazada resulta mucho más resistente que una blindada, ya que cuenta con materiales de fabricación de mayor calidad y complementos de seguridad que ofrecen mayor resistencia ante ataques e intentos de manipulación.

Cambio de cerradura puerta blindada

Cambio cerradura puerta acorazada